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Cuando ayer nos llegaban las primeras noticias sobre lo ocurrido en la linea de meta del maratón de Boston no pudimos menos que sobrecogernos y más al ver las primeras escenas de la masacre. En sucesos de estas características siempre suelen salir a la luz pequeñas historias que te tocan la fibra, como la de Martin, un pequeño de la misma edad que mi hijo mayor, que estaba esperando la llegada de su padre a meta al mismo tiempo que unos "HIJOS DE PERRA", le segaban la vida y enviaban al hospital gravemente heridas a su hermana y a su madre. Esperamos que la justicia americana atrape a estos "PERROS" y les caiga todo el peso de la justicia.
Deporte e idiologia juntos? qué locura!!!
ResponderEliminarSi hay algo en este lamentable mundo que nos toca vivir que es inocuo a la violencia, crea hermandad, solidaridad, lazos de unión entre la gente sea de la raza o condición que sea, sano para la mente cuerpo y espíritu es el correr..........
ResponderEliminarEsto no tiene sentido, jamás entenderé porque a las mentes enfermas les da por hacer daño al prójimo, sin un motivo válido o coherente, aunque la violencia nunca se justifica, y nos llaman "homo sapiens", pues a veces lo dudo mucho....muchísimo.