sábado, 28 de noviembre de 2009

LA PEREZA


Asi estoy en la última semana luchando contra la pereza y la desgana. Me esta costando bastante calzarme las zapatillas para salir a correr y aun asi lo estoy haciendo, por que reconozco que una vez entrado en faena incluso consigo disfrutar del entrenamiento pero me cuesta ponerme a ello. El tiempo ya no me acompaña, correr con temperaturas alrededor de los 5 grados a las 9.00 de la mañana recien salido del calorcito del edredón es un acto de disciplina espartana. Y asi ando ahora echando a suertes si mañana domingo madrugo para salir o no. Seguramente saldré si no amanece lloviendo o nevando; sino me entraran remordimientos al haber dejado pasar el domingo.

Con ganas me voy a quedar de no poder participar en la "dragoman 2009" , una carrera preciosa que se celebra en Villafranca del Bierzo que se celebra este domingo, pero mis ocupaciones familiares me lo impiden, otro año sera. Seguro que este año la nieve hace acto de presencia. Suerte y envidia sana para los que esten alli el domingo.

Para los que no sois de la provincia aqui os dejo el enlace de la pagina web para que le echeis un vistazo, merece la pena. http://www.dragoman2009.org/

2 comentarios:

  1. Te entiendo perfectamente Jose, llevo más de 20 años levantándome a las 6:00 de la mañana para salir a correr,, haga lo que haga y por hacer por debajo de 0 grados muchísimas veces, y evidentemente hay días que te preguntas a tí mismo, y esto porque???.
    Me imagino que hay que tener alma de masoka jejeje.
    Consuélate con pensar que correr es más sano que quedarse retozando en la cama, el cuerpo de alguna manera lo recompensa, tarde o pronto, por lo menos yo estoy de eso convencido.
    Este mundo está hecho así, lo que gusta cuesta hacerlo, el porque, quien lo sabe, lo facil, siempre es lo que aporta poco al espíritu y a la persona.
    Misterios de la vida.
    Cuidate y un saludo
    Rafa

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  2. Esa desgana hay que ir dejándola a un lado; cuesta salir del calorcillo de la cama, pero la satisfacción de la ducha después del esfuerzo también merece la pena.
    Y no nevó en Dragante, aunque en algún momento se quisieron escapar algunos copos.
    Un saludo y a desperezarse.

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