sábado, 2 de abril de 2011

¿RECUERDAS CUANDO EMPEZASTE A CORRER?


Hoy me ha dado por recordar viejos tiempos, será que dentro de unos dias es mi cumpleaños y uno se empieza a sentir un poco abuelo cebolleta.

Con la finalización del mes de marzo he recordado como antes de convertir la carrera a pie en una de mis rutinas diarias, las ganas de salir a correr siempre me entraban con la llegada del mes de marzo o de abril , es decir con la entrada de la primavera y sobre todo me animaba los dias de sol. Eso sí , nada parecido a lo que hago ahora, nada de tiradas largas, nada de series, todo rodajes suaves, de una hora a lo máximo y símplemente cuando me apetecía salir a despejarme, una semana sales dos dias, otra uno , la siguiente cuatro.

Como yo de aquella vivía en la avenida Fernández Ladreda, mis salidas se centraban en la candamia, la granja y sobre todo por los caminos de lo que hoy es el póligono urbanizado de la Lastra, que en aquellos años era mucho más bonito y bucólico , lleno de prados , huertas y granjas de vacas. Aquí sí tenía más o menos medido algún tipo de circuito. Despúes de tantos años aún recuerdo como veía con cierta envidia desde la ventana de mi casa casi todas las tardes pasar a toda pastilla dirección al Hispánico a un corredor que luego salía en todas las fotos de las carreras de la provincia. Más adelante he recordado que era Fran Torralba .


De vez en cuando me daba un calentón y me subía desde el barrio hasta el monte de San Isidro, llegaba allí, descansaba un rato entre los pinos y me volvía para casa, eso sí sin preocuparme de tiempos ni de ritmos. Estas costumbres me duraron desde los 18 años hasta los 38 más o menos. Durante este periodo de tiempo nunca participe en una carrera, aunque siempre que llegaba la Navidad y veía correr la San Silvestre me quedaba el gusanillo de querer participar.


Creo que mi participación en lo más parecido a una carrera popular fué con 13 y 14 años en la famosa marcha de Asprona de León a Valencia de don Juan con sus casi 40 kms, (y yo que pensaba que no había corrido aún un maratón). No se si alguno se acordará o participó, seguro que sí, por que llegarón a participar casi 10.000 personas , quizas los que andeis por los 40 años. Echabamos casi las 6 horas, empezabamos al trote , cuando nos cansábamos , andábamos , buscando el avituallamiento que daban cada 5km , (bocata y refresco) eso sí que era avituallamiento; como en un maratón también teniamos nuestro muro, llegando al km 30, 35, las piernas ya te decían (pilla el autobus escoba y termina con esto) pero uno con 13 años tiene mucho orgullo y el autobus se lo dejás para otros. El caso es que llegábamos a Valencia como si hubíras corrido un auténtico maratón , eso sí al dia siguiente las agujetas eran de órdago.




Después de tantos años admirando a la gente que corre y practica atletismo la carrera forma ya parte de mi rutina diaría procurando hacer entre cinco y seis dias de salidas o entrenos más o menos planificados , aunque si las obligaciones lo impiden echamos la vista atras y hacemos como años atras, salir sin ningún tipo de plan, que no deja de ser la verdadera esencia de este deporte.




Antes de terminar recordar que en breve comienzan las carreras englobadas dentro de la I copa de carreras diputación de León, así que no olvideis de inscribiros , que no cuesta nada y hay que apoyar estas iniciativas, y aunque no se corran todas las carreras lo importate es participar y que aumente el número de inscritos.http://mediamaratonleon.blogspot.com/


Esperemos que unas molestias en la cabeza del femur no me vayan a más para no bajar el ritmo de entrenamientos.

2 comentarios:

  1. Qué nostálgico te veo, igual estás pensando escribir un libro de memorias. Si es así me pido escribir el prólogo.

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  2. En una marcha Asprona fuí con mi hermano (yo tenía 14 años y él uno más). De León a Valencia de Don Juan (40 kmts por delante...). Dan la salida y mi hermano me dice: dale Javi que tú puedes. Salgo casi al sprint, llegué casi desfallecido a Valencia de Don Juan (entre los 10 primeros), se me hizo interminable esas llanuras por el arcén de la Nacional a Benavente plagada de tráfico. Comemos un bocata y ya a la tarde regresamos a León en el bus de la organización. Al llegar a GuzmÁn me bajo del bus y no podía andar, de hecho no me podía ni mover, SI ME CORTAN LAS PIERNAS NI ME ENTERO (mi hermano llama a casa desde la cabina - no había móviles en el 82- y mi padre acude en mi busca con su coche). ¡¡Qué recuerdos!!! GRANDE MI HERMANO JUAN QUE SIEMPRE ME CUIDABA.

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